Los
tiempos en los que vivimos son atribulados. Pareciera que el tiempo se acorta y
que las demandas aumentan. ¿Cómo contrarrestar el estrés al que estamos
sometidos?, ¿Cómo mantener la calma en medio del caos? Sin lugar a dudas
necesitamos herramientas que nos apoyen en el proceso y la práctica del yoga es
una gran alternativa para lograrlo.
1. Te proporciona flexibilidad física y
mental.
Uno de los beneficios más inmediatos del yoga sin duda es la
flexibilidad. Posturas que antes parecerían imposibles se vuelven poco a poco
más fáciles. Músculos y tejido conectivo claves del cuerpo empiezan a relajarse
y en consecuencia otros grupos musculares logran más y mejor rango de
movimiento. Es posible que achaques y futuras lesiones aminoren, por ejemplo: Caderas
duras, una vez relajadas alinean los muslos con los huesos de las espinillas
liberando así las cavidades de las rodillas.
Con la flexibilidad física regresa el movimiento, la expresión
corporal total y con ello recuperamos la creatividad, el buen sentido del humor
y el optimismo. ¡Con la flexibilidad mental las posibilidades se vuelven
infinitas!
2. Mejora la postura del cuerpo.
El yoga con
su combinación de estiramiento y fortalecimiento muscular, una respiración y
atención enfocadas, brinda a problemas causados por vicios corporales una
corrección inmediata. Una postura correcta, además de ser estéticamente
atractiva, evita problemas de columna, hace que el cuerpo se oxigene bien,
generando seguridad y confianza interna.
3. Mayor oxigenación del cuerpo y mejor
salud.
El oxigeno
es esencial para cada célula de nuestro cuerpo y al aplicar la respiración Yóguica,
se obtiene una buena oxigenación del cuerpo, que ayuda a erradicar grandes
rangos de malestares y problemas de salud. Además con una buena oxigenación se elimina la fatiga, se regula el pH del cuerpo y desintoxica
el sistema renal, aumentando así las defensas y creando un sistema inmunológico
más fuerte.
4. A través de la respiración aprendes a
controlar los desequilibrios emocionales.
Muchas veces cuando una persona se encuentra
deprimida su respiración es superficial y restringida, esto causa un inadecuado
abastecimiento de oxigeno en la sangre, lo cual puede resultar en una serie de
desbalances emocionales. Afortunadamente la práctica de Yoga al enfocarse en la
respiración profunda puede aligerar el mal humor e incidir en la cura de la
depresión.
5. Mejora el funcionamiento del organismo
en general.
Cuando tu
organismo se encuentra en buen funcionamiento interno, se refleja de manera
externa, en la piel, el estado de humor y sobre todo el bienestar general.
6. Promueve la concentración abriendo el
espacio para estar presente.
La mente
es un instrumento que acompaña al ser humano desde el nacimiento, una mente
estable y unificada es una herramienta valiosa, por que reflexiona con claridad
y precisión. Una mente sana en un cuerpo sano se irrita por menos cosas y logra
una ecuanimidad y juicio correcto de las circunstancias y su entrono. Espiritualmente,
es este estado mental el que genera sabiduría que ilumina.
7. En general proporciona un estado de
armonía.
La armonía
en la vida, hace que todo fluya y se co-relacione entre si, tanto mente, cuerpo
y espíritu están equilibrados reflejando bienestar proporcionando un estado de
realidad donde todo es posible.
8. La mente se tranquiliza y el cuerpo
descansa.
El
pensamiento es nuestra mayor fuerza creadora y cuando la mente entra en un
estado de relajación, el cuerpo también lo hace, esto ayuda a manejar una
presión arterial baja, con menos estrés y enfermedades.
¡Los beneficios no sólo se limitan a estos, pero por lo pronto ya tienes muy buenas razones para seguir con tu práctica de yoga o comenzarla, si es que nunca has practicado antes!