La práctica natural. De lo continuo

Observa las formas que toma la energía para manifestarse. Si miras bien, hallarás un profundo sentido de interconexión en todo su espacio, como un inevitable discernimiento del ser en la naturaleza, como si el movimiento natural vibrara en un sentido atento del entorno. Nuestro sello humano implica una exclusión de lo que somos,  porque la mirada se desvía a lo que podríamos o deberíamos ser, o bien, a lo que podríamos o deberíamos haber sido. En lo más profundo de nuestro pasado, en la historia de cada uno de nosotros, humanos, se desliza una palabra sedienta de conocimiento, de reconocimiento. Una palabra que nos aleja del acto sensible. Editamos, filtramos, interpretamos, dilucidamos, comentamos, explicamos. La palabra que en nosotros es pan de día, también recrea la ignorancia de nuestros cuerpos en sintonía con lo que le rodea. Tantas clasificaciones y diferencias, nos alejan de la unidad compartida con todo ser presente en la tierra. La práctica de Yoga es un perpetuo retorno al ser ferviente que nos habita, nos presta una mirada que aprecia la unidad y no la diferencia, que añora un pasado de conexión que recuerda. Ya decimos que las asanas como vínculos con la tierra son además un retorno imaginado de unidad y continuidad. En las bases hinduistas del yoga podemos hallar la relación estrecha entre todo lo que vive, tal como se señala en el Chandogya Upanishad: “todas estas criaturas, amigo mío, tienen su raíz en el ser. Tienen el ser por morada, el ser por fundamento”. En otras palabras, se trata del principio que sostiene al mundo en movimiento, más allá de las formas en las que se presenta (árbol, pez, niño). Por eso, si en algo el camino del Yoga es radical, es por desentrañar sutiles virtudes que yacen más allá de cualquier convención cultural y que en el fondo, no son más que un grandioso tejido nacido de una misma hebra. Yoga como unidad es un recorrido conjuntivo  que muestra la mismidad entre todos los seres, que corta con el intenso sentimiento de un Yo individual al que hay que defender… razón que atraviesa gran parte de la historia de la humanidad confiriéndole dificultades de relación.

Si practicas asanas, observa el lienzo compartido que ocupa a cada tramo de tu cuerpo, observa de qué manera entran las posturas en ti y cómo no es más que un momento de soltura. Siente las formas en que la energía se liga a través de la materia, afírmate como un humano entre otros, como la humanidad entre otras especies, como un ser entre otros, cuestiona al Yo que busca la separación y vive ligado a lo que sucede en cada instante.

Namasté.

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Dos ideas para ayudar a los animales del mundo:

1.- Desde siempre, los lobos han sido un claro objetivo de cacería en distintas zonas del mundo, principalmente en los Estados Unidos, las razones son muchas, desde comerciales hasta deportivas. Recientemente, el presidente de EE.UU. Barack Obama ha suprimido una ley que los protegía, por lo que la siguiente alerta es una invitación a colaborar con una organización que se dedica enteramente a buscar nuevamente los resortes para su protección. En la página siguiente podrás encontrar varias ligas donde colocar tu firma de apoyo para estas maravillosas criaturas (la liga está en inglés, pero aún sin su dominio es fácil colocar una firma, entrando a los subrayados de la página). Ésta es la entrada:

www.savewolves.org

2.-  Una elección prudente al elegir un animalito de compañía es adoptar uno de los miles que se encuentran esperando un hogar. Aquí se muestran 4 gatos y 4 perros en adopción (Distrito Federal). Cualquier pregunta sobre los mismos puede dirigirse al siguiente mail: [email protected], con la señorita Tamara. Por lo general los animalitos en adopción ya se encuentran desparasitados, vacunados y bañados al entregarse, ¡listos para su nuevo hogar!. Gracias.