Malasana se asemeja a una guirnalda de brazos y manos alrededor del cuerpo. Es una gran postura que tonifica los órganos abdominales y alivia dolores de espalda y de rodillas. También es una postura excelente para mejorar la flexibilidad en las caderas y en la espalda baja, y es una preparación útil para algunas de las posturas sentadas más desafiantes. Aunque parece una postura muy simple, tiene muchas sutilezas, por lo que la postura se aprende en etapas. No debes frustrarse si no puedes llegar a la etapa final. Practica regularmente la postura y permite que tu cuerpo vaya tomando la postura de manera natural.
Fase I
La mayoría de los practicantes encuentran difícil, al principio, repetir esta postura lejos de la pared sin caerse hacia atrás o levantar los talones. Si es tu caso, usa una silla. Párate en Tadasana. Eleva los brazos paralelos al piso y luego flexiona los tobillos, rodillas y caderas para bajar con control a Malasana. A medida que tus nalgas se aproximen a tus talones lleva el peso hacia adelante (si sientes que te vas hacia atrás toma entonces la silla). Mantén todo el tiempo los talones y los bordes internos de los pies bien en el piso y separa lo suficiente las rodillas para llevar el pecho hacia adelante por entre los muslos. Relaja los muslos hacia las ingles, las ingles hacia adentro, y mantén el piso pélvico y el abdomen elevados. Extiende tu pecho y tus brazos lejos al frente y mira hacia delante. Aprieta bien los muslos contra los lados del torso. Las caderas no deben caer como un peso muerto, sino deben de estar sostenidas por la fuerza de las piernas. Relaja los músculos de la espalda baja sin perder las acciones anteriores y sostén la postura 60 segundos.
Fase III
Para la fase final repite la fase III, luego suelta tus tobillos, y lleva un brazo a la vez por tu espalda y engancha los dedos de las manos. Sostén unos segundos, y luego dóblate más hacia adelante y apoya la cabeza en el piso. Permanece en la postura entre 30 a 60 segundos y luego inhala, levanta la cabeza y sal de la postura. Recuerda que también en esta fase debes mantener las acciones aprendidas en las fases anteriores.
Texto: Paul King y Chantal Gómez Jauffred
Modelo: Chantal Gómez Jauffred
Ambos profesores de Practica Yoga en Guadalajara