CINE
SUNKA RAKU – ALEGRÍA EVANESCENTE DIRECTOR HARI SAMA
ESTRENO 18 DE MAYO
Sunka Raku es un documental de la casa productora Catatonia de Carlos Hari Sama que se estrenará éste próximo viernes 18 de mayo.
Este documental narra la historia de la búsqueda y transformación espiritual de un alma excéntrica y en ocasiones obsesiva de un hombre “sui generis”.
La historia narrada en 4 estaciones, retrata la vida de Roberto Behar y su búsqueda por encontrar la paz después de haber sufrido abusos y traumas durante la adolescencia.
En sus años de joven, el protagonista se obsesiona con el clavecín, tanto que va a Francia a tomar clases y le pasan todo tipo de experiencias. Luego el protagonista regresa a la Ciudad de México, donde comienza a desarrollar ideas creativas y únicas para las marcas más relevantes de esas épocas.
Con el paso del tiempo, Behar viaja a Japón en donde experimenta los rituales del té y lo cuál transforma su camino. De tal suerte que Behar regresa a México y en un terreno del Ajusco, construye a mano una casa de té japonés idéntica a las que existen en el país asiático. La precisión y belleza del espacio es admirada no sólo por la comunidad japonesa en la ciudad, sino por japoneses que viven en Estados Unidos y vienen a conocer el lugar. La milenaria práctica de China es, finalmente, lo que trae paz al protagonista, y a aquellos que participan del ritual.
Sunka Raku es una vida narrada a través de las cuatro estaciones del año y además de la historia, vale mucho la pena reconocer la exhuberancia natural de nuestro Ajusco mexicano y la transformación espiritual del protagonista.
Hay que apoyar al cine mexicano y por eso les recomiendo que vayan al cine a verla éste próximo viernes 18 de mayo.
FICHA TÉCNICA
Director: Hari Sama
Guionista: Hari Sama
Reparto: Roberto Behar
Casa productora: Té Films Producciones, FOPROCINE Fotógrafo: Miguel López
Música: Erick Bongcam Género: Documental Duración: 113 minutos Año: 2015
País: México
Idiomas: español, inglés, japonés
FESTIVALES & PREMIOS
Festivales
- Festival Internacional de Cine de Morelia 2015
- Festival Internacional de Cine y Arquitectura (FICARQ) 2015
- Hanoi International Film Festival 2016
- Festival de Cine de Lima 2016Premios
• Festival Pantalla de Cristal 2016: Mejor Edición, Mejor Banda sonora / Música y Mejor Banda Sonora / Realización de Audio
PROTAGONISTA
El día 29 de abril, la Oficina del Gabinete del Gobierno de Japón hizo pública la lista de condecorados extranjeros para la primavera de 2018. En México recibirán la Condecoración de la Orden del Sol Naciente, Rayos de Oro y Plata, dos mexicanos, uno de ellos, es el Sr. Roberto Behar Calderón, Presiden- te de Urasenke Tankokai México A. C. por su labor tanto en la
difusión de la cultura de Japón como en el fortalecimiento de la amistad entre Japón y México.
DIRECTOR
Estudió la licenciatura en Cinematográfica en el Centro de Capacitación Cinematográfica (CCC) y composición musical en el Centro de Investigación y Estudios Musicales (CIEM), Ciudad de México. Ha participado en numerosos festivales alrededor del mundo obteniendo varios premios para sus largome- trajes y cortometrajes.
FILMOGRAFÍA
Sin ton ni Sonia (2003) / Cecilia Suárez, José María Yazpik
Premio del Público en el Festival Internacional de Cine en Guadalajara (FICG) Presentación en el Festival Internacional de Cine de San Sebastián.
El sueño de Lu (2011) / Úrsula Pruneda
Mención Especial por su largometraje de ficción en el Festival
Internacional de Cine de Morelia (FICM).
Premio a Mejor Actriz para Úrsula Pruneda: en la 55a entrega de los
premios Ariel, México.
Premio a la mejor actriz en el Festival Internacional de Cine de Shanghai 2012 Premio a la mejor actriz en el Festival de Cine de Málaga 2013
Despertar el polvo (2013) / Julio Escartín
Premio Kukulkán Riviera Maya Film Festival, México
Proyecto de Cine Independiente: Premio mejor película / Festival de Cine de Tres Fronteras 2014
Esto no es Berlín (2018) / Xabiani Ponce de León (en post producción)
Entrevista de Cinema Movil con Hari Sama
Este documental de vena personal acerca de la creación artística, la locura, la muerte y la sanación, representadas en la extravagante figura de Roberto Behar,sobrino de Frida Khalo y obsesivo concertista de clavecín en su adolescencia, apasionado de la cetrería, exitoso publicista y arquitecto autodidacta de un par de casas dedicadas a la ceremonia del té según la tradición milenaria japonesa ubicadas en el Ajusco construidas minuciosamente durante casi una década por él mismo.
Hari Sama: “Yo conocía a Roberto de hace varios años atrás en un ámbito laboral, ya que yo trabajé en su casa productora. Y es ahí donde me enteré que él practicaba las ceremonias del té de las cuales no sabía a ciencia cierta de qué se trataban, aunque siempre he tenido una fuerte atracción por Oriente. Cuando me ocurrió aquello de la vida que me hizo filmar El Sueño de Lu, tenía una enorme necesidad de algo muy práctico, yo venía de estar vinculado a escuelas de índole meditativo-espiritual que reflexionaban mucho sobre la muerte de una manera muy teórica y me empecé a desquiciar, yo necesitaba algo más bien silencioso. Entonces me acerqué a Roberto, le pregunté si me podía dar clases, aceptó y así me convertí en su primer alumno de ceremonia del té.
Entonces estuve un año asistiendo todos los lunes a su casa para hacer cosas muy profundas que de alguna manera me anclaron en el presente y en el ahora, y eso hizo mucho más transitable un momento muy doloroso. En ese contexto lo fui conociendo más, entendí lo que significaba ese ritual, porque al principio yo sólo veía unos jardines muy bonitos y unas casas hechas de madera, pero poco a poco fui viendo el nivel de compromiso, de entrega y de trabajo que habían implicado su construcción, era una especie de Taj Mahal a pequeña escala. De ahí tuve una epifanía, pensé que era importante para mí poder plasmar un tema que me interesa muchísimo como artista: las posibilidades que ofrece la vida en función del dolor. Indagando, me di cuenta que existía un espejo entre Roberto y yo, ambos crecimos en un ámbito de familias disfuncionales y en su caso, su situación la convirtió en una revolución de creatividad muy luminosa, rica y exuberante.”
“Siento que como autores nos sentimos muy inclinados a mostrar el lado oscuro de la vida, es una tendencia del arte. A mí curiosamente los testimonios del compositor Julio Estrada me resultan un contrapunto muy interesante en la película. Hay un parte donde él habla cómo se coloca permanentemente en el abismo para poder crear pero sin dar el siguiente paso. El espíritu de los que nos dedicamos a estas cosas ya de por sí tiene una implicación de una sombra muy grande y que eso hace esta especie de balance muy raro. El equilibrio humano es muy delicado, y uno tiene muchos miedos y muchas necesidades no cubiertas que van encontrando lugares de donde colgarse y muchas veces no son los más luminosos.”
“Sí, ese es el nombre de la segunda casa que construyó Roberto. Es un concepto zen que en mi opinión envuelve mucha sabiduría acerca de que nada es permanente, de que las cosas se van marchitando con el tiempo y que está bien, que no hay que pelearse con ello. Entonces me parecía que si la felicidad puede ser evanescente, el dolor también y siento que recoge muy bien la esencia de la película.”
“La ceremonia del té es de una complejidad inmensa porque abarca todas las grandes artes antiguas del Japón y tiene mucho que ver con la observación, por ejemplo saber observar la taza y entender que proviene de tal horno porque ese horno hace que el esmalte sea más café y que se noten mucho las manos del artesano. Además hay que aprender toda una serie de movimientos los cuales son muy precisos y te obligan a estar concentrado, es una práctica muy activa en ese sentido que implica un proceso de estar en el presente, porque si no, te equivocas. Los samuráis en esas equivocaciones perdían la cabeza, aquí no pasa nada, pero para mí ha sido una puerta de apertura interior enorme.
También es interesante que todo tiene un nombre poético y autor, hay una enorme veneración hacia los objetos pero no desde un lado superficial sino de saber por cuántas manos ha pasado, cuántos años lleva aquí; existe un cuidado en las casas, el tatami, los jardines, tú preparas con esmero y durante varias horas el jardín para la llegada de tus invitados y al final, antes que lleguen, rocías un poco de agua. ¡En serio, es una clavadez! He aprendido a entregarme un poco a los demás, de poder ser un buen anfitrión y estoy muy agradecido con eso.”