En el Occidente la práctica del Yoga se ha difundido con gran rapidez en los últimos años. Sin embargo, poco se sabe del Ayurveda la cual representa un componente esencial para extender la sabiduría que nos brinda el Yoga en la vida cotidiana.
Tanto el conocimiento del Yoga como el del Ayurveda se encuentran en las escrituras védicas, particularmente en el Rig-Veda y el Atharva Veda, los cuales se remontan al año 2500 a.C.
La palabra yoga, proveniente de la lengua del sánscrito, significa unir o juntar. En términos de la práctica del Yoga se busca unir el espíritu individual con el espíritu universal. Por otro lado, el Ayurveda, compuesto por la palabra Ayuh que signfica vida y Veda que representa ciencia, es la ciencia de la Vida que, además de ser uno de los sistemas de medicina más antiguos, describe las prácticas que se pueden realizar para mantener nuestro cuerpo en equilibrio.
En conjunto, el Yoga y el Ayurveda, conforman un modelo completo e integral para obtener la salud y el bienestar a nivel físico, mental y emocional. Hoy en día, es común que el Yoga se enfoque o se limite únicamente a la práctica de ásanas o posturas. Cuando en realidad cabe recordar que éstas sólo representan una de las ocho ramas que componen esta disciplina y que, la intención primordial del Yoga, es incrementar nuestro equilibrio mental y con ello lograr mayor claridad y estabilidad.
Los principios del Yoga están comprendidos dentro del modelo de los gunas.
El Ayurveda se enfoca en describir cómo recobrar la inteligencia natural de nuestro cuerpo para cumplir con los procesos fisiológicos de forma eficiente y con ello mantener el cuerpo sano y libre de toxinas. Los principios del Ayurveda se basan en la teoría de los cinco elementos y en el modelo de los tres doshas (vata, pitta y kapha).
El Ayurveda enfatiza la importancia de una alimentación adecuada y los efectos tanto de la comida como de nuestro medio ambiente en las funciones corporales y en nuestra salud en general. A pesar de que el Yoga no describe a detalle los efectos de la comida y el medio ambiente en la salud física y mental, sugiere mantener una dieta y un estilo de vida sanos utilizando el mismo modelo que el Ayurveda propone. Asimismo, a pesar de que el Ayurveda se enfoca en sanar el cuerpo principalmente, también utiliza el modelo de los gunas del Yoga para lidiar con la psicología de la mente.
Los gunas son conceptos básicos en el entendimiento de la filosofía védica. Se considera que el universo entero está compuesto de tres cualidades intrínsecas en todo lo existente y que son:
- Sattvas.
- Rajas.
- Tamas.
Sattva es la cualidad de la claridad, pureza y consciencia. Un estado mental sáttvico es aquél en el que nos sentimos plenamente completos y satisfechos. Actuamos con conciencia y serenidad, libres de expectativas. Por otro lado, cuando la mente está dominada por rajas, se actúa con consciencia y claridad. Sin embargo, predominan las expectativas de los resultados de ciertas acciones y con ello la ansiedad causada por la incertidumbre si estas se cumplirán o no. Estas emociones pueden provocar vulnerabilidad e impulsividad en nuestras acciones y respuesta ante las situaciones que se nos presenten. Por último, cuando tamas predomina en la mente, hay carencia de claridad y de dirección en cómo se debería manejar y actuar ante una determinada situación. Esto resulta en la inhabilidad para la toma de decisiones y en la falta de energía para enfrentarla.
Con base en esto, es deseable desarrollar cualidades sáttvicas en nosotros mismos para lograr un mayor equilibrio mental. El Ayurveda reconoce alimentos que ayudan a nutrir estas cualidades sutiles de la mente, así como rutinas diarias y lineamientos de estilo de vida que nos permitirán gozar de salud y bienestar. Asimismo, el Yoga armoniza el cuerpo sutil y la mente, y promueve la desintoxicación de órganos mediante las posturas o ásanas.
Es así, como el Yoga y el Ayurveda nacen de la mano y se consideran como ciencias hermanas y complementarias. Practicarlas en conjunto nos brindan las herramientas para profundizar en el conocimiento de nuestra propia naturaleza y vivir en armonía con los que nos rodean.
Michele Torres
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